Activación de la demanda

El mejoramiento de las condiciones de saneamiento y agua en una localidad no puede realizarse solo por medio de la implementación de infraestructura, como la construcción de inodoros o plantas de tratamiento de aguas residuales. Todavía son muy comunes los programas de agua y saneamiento millonarios con un enfoque basado en la “oferta”, que fallan porque organizaciones externas tienen en sus agendas implementar “algo” que los usuarios no desean, o quizás no entienden.

En algunos casos, son los Gobiernos Regionales y Locales quienes piden apoyo externo para mejorar la cobertura en agua potable y saneamiento. Sin embargo, se debe considerar que el nivel de demanda en servicios de agua y saneamiento dentro de la población en general es mucho menor que el de sus autoridades municipales, que tienen el mandato de cumplir con una política nacional. Las personas solo usarán los sistemas de agua y saneamiento cuando realmente sean desarrollados por necesidad propia (demanda). Además, las comunidades solo aceptarán soluciones a la problemática de agua y saneamiento cuando las entiendan y les vean sus beneficios.

Después de los fracasos del pasado (e incluso actuales), se ha entendido que el mejoramiento de la gestión del agua y saneamiento requiere de una intervención a nivel doméstico y comunitario, para lo cual, el incremento de la demanda individual de dichos servicios es de importancia primordial para el éxito del proyecto.

En 1998 el Programa de Agua y Saneamiento del PNUD/Banco Mundial propuso el “enfoque basado en la demanda” como estrategia para mejorar la sostenibilidad de los servicios. Este enfoque considera a la participación de la comunidad como uno de los factores que tienen un efecto directo sobre la sostenibilidad de los sistemas. De acuerdo con el enfoque, las comunidades deben participar en todo el proceso de implementación de los proyectos, conociendo las ventajas y desventajas de las opciones técnicas, así como los requerimientos y costos para la operación y mantenimiento (BORJAS 2010). Para esto es fundamental que se conozca a profundidad las características de las poblaciones, identificando sus rutinas, faenas, costumbres y valores, así como sus capacidades de aporte, pues en muchos casos los miembros de la comunidad no cuentan con el tiempo de participar con su trabajo en la construcción de sistemas, pero si pudieran colaborar con otros insumos, una vez activada la demanda.

Se puede activar la demanda de sistemas que permitan satisfacer las necesidades y aspiraciones de los usuarios finales cuando existe motivación, oportunidad y capacidad para invertir en sistemas de agua y saneamiento:

• Motivación se define como una condición iniciada por una necesidad fisiológica o psicológica que pone al individuo en acción para cubrir esa necesidad. Motivación es el interés genuino de un individuo que causa que se comporte de cierta manera para lograr un objetivo. La motivación consta de 3 elementos independientes que interactúan entre si: necesidades, precursores e incentivos. Mientras que las necesidades son inherentes del individuo, los precursores e incentivos pueden ser externos y son elementos de los programas de activación de la demanda en una comunidad. Se debe entender que el precursor en saneamiento no es solo el mejoramiento de la salud, sino también beneficios directos como la comodidad, privacidad, seguridad, evitar la discriminación por sexo, prestigio, etc.
• Oportunidad. No basta que los miembros de una comunidad estén motivados en mejorar sus condiciones de agua y saneamiento, ellos deben también poder acceder a la información y a la infraestructura, teniendo la oportunidad de lograr un cambio.
• Capacidad de contar con los recursos necesarios para aprovechar las oportunidades, y así obtener asesoría, materiales y equipos, y contratar mano de obra, así como pagar la cuota de servicios de operación y mantenimiento.

Los pasos de la planificación participativa se ilustran en la siguiente figura y se encuentran descritos en la ficha de introducción al proceso de planificación participativa (en este enlace).

Posterior a la fase de exploración y si se determina que no existe una demanda real de proyectos de agua o saneamiento en la población local, se debe realizar un proceso de activación de la demanda. Solo si esta se ha realizado, se puede seguir con la fase de toma de decisiones.

Frecuentemente, los sistemas implementados en proyectos basados en la “oferta” son poco usados, no se operan, ni se mantienen correctamente, y además no son sostenibles en términos financieros. Esta situación se da porque no se consideran las características de la población. Con la finalidad de crear demanda de sistemas de agua y saneamiento, es necesario identificar las necesidades y aspiraciones de los miembros de la comunidad, así como también los aspectos de saneamiento sostenible y de gestión del agua que son más interesantes para ellos, es decir los precursores. Cuando se hayan identificado estas claves, estas se pueden utilizar como los mensajes claves que aumenten el nivel de demanda de sistemas de agua y saneamiento sostenible en la comunidad.

Un ejemplo: En un proyecto en Mongolia, una ONG inició un programa de promoción de saneamiento explicando a los miembros de la comunidad que los nuevos inodoros mejorarían su salud, sin embargo la gente no se interesó en esto. Solo cuando ellos entendieron que el nuevo sistema les permitiría tener mayor comodidad para usarlos y lo más importante, que estos no expedían malos olores, la gente se interesó. En este caso la atracción de la demanda fue el incremento de la comodidad, y no los aspectos de salud.

Para la identificación de los precursores para atraer la demanda, el equipo de planificación, en conjunto con los actores, deberá organizar consultas con miembros seleccionados de la comunidad para identificar sus aspiraciones entorno al proyecto. Esta consulta se podría ejecutar por medio de:

• Talleres: miembros elegidos de la comunidad podrían ser invitados a talleres, donde se les pedirá comuniquen sus aspiracionesy necesidades respecto a sistemas de agua y saneamiento sostenible.
• Ensayos escolares: los niños de las escuelas podrían escribir ensayos cortos acerca de las maneras en que sus padres podrían beneficiarse de condiciones adecuadas de agua y saneamiento, así como también de un ambiente limpio.
• Visitas casa a casa: podría ser de ayuda organizar visitas “casa a casa” dentro de la comunidad, pues se podría entrevistar a las familias acerca de sus expectativas respecto a sistemas de agua y saneamiento. Esto facilitaría el contacto con miembros de la comunidad que no participan comúnmente en las reuniones o talleres, p.ej. mujeres o ancianos.
• Reuniones con la comunidad para discutir las condiciones actuales de agua y saneamiento, los problemas y las soluciones, etc.
• Otras herramientas: con la finalidad de comprender mejor de las condiciones existentes de agua y saneamiento en el área y sus problemática, se pueden usar también herramientas de análisis como: análisis con el árbol de problemas (en este enlace), caminata transversal, grupos de enfoque, descripción de las condiciones existentes, etc.